Personajes como Luke Skywalker,
el cual es el aprendiz de caballero jedi, durante la trama se le ve entrenando
con el propósito de vencer a sus adversarios, pero sin sospechar que el enemigo
era su padre. He ahí que observamos el meollo de la película. También hay
personajes como la princesa Leia, quien en determinado momento inicia un
romance con Luke, pero luego se descubre que son hermanos y se finaliza el
embelesamiento.
Star Wars nos pinta cómo sería
una realidad futurista, en que podríamos viajar a la velocidad de la luz. Tener
poderes que escapan a lo imaginable: como la telekinesis, es decir, poder mover
objetos con el poder de la mente. No importando el tamaño, como lo vimos
realizar al maestro Yoda. Incluso se puede notar que personajes como Obi-Wan
Kenobi y el mismo Luke Skywalker tenían el poder de dominar la mente de sus
enemigos.
Ese poder también lo tenía el padre de Luke, quien en la película lleva el nombre de Darth Vader, pero luego se devela que su nombre original es Anakin Skywalker. Por tanto, todas las películas de la saga Star Wars, nos hacen viajar e imaginar una realidad alterna. Un espacio y tiempo que surgió de la mente de George Lucas, quien podría nominársele como uno de los pioneros de las mejores películas de ciencia ficción. Además, habiendo pasado 45 años podríamos reconocer a su creador como una de las mentes más creativas en el mundo del cine.
Esgrimista
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