En cierto pueblito de la sierra,
según el personaje que narra la historia, su padre, Calixto Garmendia, vivía
feliz y sin problemas, pero un día llegó una peste llamada la Tifo, y mucha
gente se fue muriendo como moscas. Por tanto, el cementerio ya no tenía más
capacidad, por lo cual, en vez de enterrar a los que seguían en los terrenos de
los ricos, tomaron sin permiso unos terrenos que le pertenecían a Calixto
Garmendia. Y cuando él mismo fue a reclamar, pensando que le devolvieran sus
terrenos, le decían que no era posible, e incluso ni siquiera le querían
indemnizar. Arguyendo siempre que no había plata para pagarle.
Calixto Garmendia era un
carpintero, quien era conocido por luchar contra las injusticias. Siempre sus
vecinos lo llamaban para que los apoyara. Sabiendo de su carácter y su espíritu
de lucha. Sin embargo, al cansarse de esperar y esperar, y nada. Tomó la
decisión de vengarse de sus deudores. Saliendo una noche con los bolsillos
llenos de piedras, y se dirigió muy silente hacia las casas de los que él
consideraba los mandones, y los que no querían pagarle. Entonces, cada noche,
incursionaba en determinada casa y lanzaba piedras, las cuales rompían los
tejados. Y eso a Calixto Garmendia lo solazaba.
Era como una especie de venganza
personal. Además, como carpintero no ganaba mucho. No obstante, sí ganaba
cuando fallecía alguien del pueblo. Ahí si le iba bien. Sin embargo, empezaron
a morir los que él llamaba los mandones, quienes eran las autoridades de aquel
pueblito. Y que Calixto Garmendia, pensaba para sus adentros que ahora ellos
tragaran la tierra que le quitaron. Y llegó el momento en que el alcalde murió,
y dicho deceso fue para el carpintero como una venganza. No obstante, cuando lo
sucedió otro alcalde. Por un momento, pensó que aquel sí le pagaría, pero
tampoco lo hizo, e incluso arguyendo también que no había plata.
Por tanto, tanta fue la cólera de
Calixto Garmendia que el nuevo alcalde lo encarceló por agitador, por quince
días. Y pasado un lapso de tiempo, el carpintero falleció.
Ciro Alegría
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