Juan Mujica
Dentro de 100 años y
tres días,
El aroma del silencio
lunar
Romperá sus esquemas
astrológicos,
Y se bifurcará en
doble caudal.
Aquella
defenestración causará nada más
Que desdichas en el
norte,
Pero felicidad en el
sur,
Por lo demás, las
hojas de los árboles,
Desenraizados reverdecerán,
Mas las auroras
boreales se congelarán,
En los volcanes
ardientes,
Pero lo más
desconcertante será,
Que aquella mujer que
jamás me miró sin sonreír,
Para ese tiempo no
quedarán ni sus pestañas.
Sin olvidar que las
líneas de mi mano se borrarán,
Y que mis huesos
quedarán putrefactos,
Pero lo único que se
mantendrá en pie,
Será este punto
final.
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