Majestuoso ser viviente,
considérate con certeza,
pues te aseguro sonriente,
que posees gran riqueza.
De tu empeño ya depende,
lo que en el futuro vayas logrando,
pero eres joven y por ende,
no te apures pues irás progresando.
Inteligencia eres mi bendición,
tú haces la vida placentera,
pues el día de tu extinción,
llorará la humanidad entera.
Sin embargo mi entusiasmo frena,
pues noto con cólera encendida,
que a pesar que tu presencia truena,
te dejan pasar inadvertida.
Malagradecidos execrables,
ciegos de voluntad,
siéntanse repudiables,
merecen muerte sin piedad.
Corazones con humildad,
manténganse siempre avantes,
pues les aseguro con sinceridad,
que les lloverán los diamantes.
Juan Mujica
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