Obviamente que me estoy refiriendo a la cuestionada labor de la Ministra de Cultura, Susana Baca, a quien en estos pasados días se le armó la polémica que si podría continuar con la cartera de cultura, ya que tenía compromisos en el extranjero como cantante. Sin embargo, ella dijo que iba a cancelar sus próximas presentaciones y a dedicarse a su labor encomendada. Además expresó que nunca había dejado de trabajar en su magisterio.
Aparentemente esta situación ya habría sido controlada. Puesto que no se trata de dos trabajos que uno puede sobrellevar, ya que se trata de administrar el ministerio de un país, y ello requiere toda su atención. No estamos hablando de un segundo trabajo que uno puede hacer en sus ratos libres, sino de un compromiso con los peruanos. Y si no hubiera declarado que iba a omitir sus presentaciones, lo más probable era que sería sacada de su cargo, para proponer a una persona que si pudiera y tendría la disponibilidad íntegra de asumir el cargo del Ministerio de Cultura.
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